3 abr 2006

El cardenal Lozano

Escrito en Octubre del 2004
Esta semana se desarrolla en Guadalajara, Jalisco, el 48 Congreso Eucarístico Internacional, el primero del Tercer Milenio.

El encuentro cristiano ha sido un éxito – según los organizadores- ya que congrega a fieles de 87 países del mundo, además entre los asistentes se cuentan a 35 cardenales, 250 obispos y más de mil sacerdotes. El Congreso motivó una enorme participación popular la peregrinación del martes 12 unió en sus diferentes puntos a 3 millones y medio de fieles; todo un record.

En el congreso, hay posiciones dignas de ser analizadas, como la del cardenal Claudio Humees arzobispo de Sao Paulo, Brasil que ha dicho que en lugar de iniciar el Tercer Milenio en la paz de Cristo, la humanidad lo ha iniciado en un tenso ambiente de guerra y terrorismo. O el discurso del cardenal Bernard Law, quien habla de luces y sombras en la práctica actual de la fe.

Pero – siempre hay un pero- hubo un prietito en el arroz, que has mostrado en el Congreso una actitud intolerante y discriminatoria. Se trata de las declaraciones desafortunadas del eminentísimo cardenal Javier Lozano Barragán.
Carlos Fuentes Aguirre más conocido como Caton señala en su muy leída columna que las declaraciones “no (las) transcribo porque su tono es tan violento e injurioso que repetirlas me daría vergüenza”.

Muchos políticos y ciudadanos católicos han exigido una disculpa pública. Hasta este momento no se ha concretado, y difícilmente lo hará. Tibiamente Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de México ha dicho que La Iglesia Católica respeta y apoya a los homosexuales aunque no aprueba las sociedades de convivencia, recién legalizadas en España.

El que pidió perdón como católico fue Catón y ha conminado al cardenal a que lo haga.

¡Ningún líder religioso tiene derecho a insultar y discriminar a nadie!
Dice el evangelio que quien este libre de pecado tire la primera piedra.

La Iglesias católica en este tercer milenio no ha querido discutir muchos de sus pecados. Algunos les han costado muchos millones de dólares y la pérdida de muchos feligreses.

El ex arzobispo de Zacatecas debería de hacer un acto de contrición y pedir perdón. El no es cualquier cardenal se trata del primer mexicano en la historia de la Iglesia católica que ocupa un lugar dentro de la curia romana; el orgullo para muchos mexicanos.

Era para mí– hasta antes de la declaración- considerado como una persona conservadora pero tolerante y culta.
En un tiempo fue teólogo de la liberación y muy cercano al Cardenal Corripio Ahumada; tiempo después prefirió al nuncio Girolamo Prigione.
En 1994 pretendió ser presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, pero no tuvo él apoyó suficiente de sus hermanos obispos.

Ahora, algunos analistas lo colocan en la carrera de la sucesión papal.

El encuentro en Guadalajara concluirá este domingo, 17 de octubre, con un mensaje de Juan Pablo II mediante una conexión especial televisiva vía satélite. Pero antes, antes del mensaje papal, los católicos con preferencia sexuales diferentes esperan una disculpa, sino se hace, entonces el Congreso terminará con más sombras que luces.